Calamarismo
¿Para qué quiero mis ojos si tú ya no estás aquí?
¿Qué sentido tiene abrirlos si no hay luz después de ti?
¿Para qué quiero mis manos si tu tacto lo perdí?
Dos palomas que hace tiempo son estatuas de jardín.
¿De qué sirven mis palabras si me estallan en la cara
como un gran globo de lágrimas saladas
de esta niña que aún te canta?
Si algún día nos cruzamos, no respondas ni hagas caso
a los subtítulos que bajo mi sonrisa sabes ver.
Yo te diré qué voy tirando, negaré que estoy llorando.
Fingiré que el tiempo todo lo curó.
¿Para qué quiero yo el tiempo si mi vida se paró
a la hora del momento en que tú me dijiste adiós?
¿Para qué quiero este mundo si mi sol ya se apagó?
¿Si doy vueltas por inercia dentro de esta habitación?
¿De qué sirven mis sonrisas si no son más que mentiras
que se rompen al llegar a esta oficina
que antes fue nuestra guarida?
Si algún día nos cruzamos, no respondas ni hagas caso
a los subtítulos que bajo mi sonrisa sabes ver.
Yo te diré qué voy tirando, negaré que estoy llorando.
Fingiré que el tiempo todo lo curó.
Y en realidad nunca te olvido, fuiste mi único camino
y tu sonrisa un buen motivo para ser alguien mejor.
Y aunque te cuenten que me vieron de princesa en algún cuento
no hace falta que te diga que tan sólo cuentos son.